Nacedero del Urederra: El Caribe Navarro
En una entrada que escribí con los 10 sitios por los que merece la pena venir a Navarra ponía como el numero 1 el Nacedero del Urederra. El monumento natural navarro ha cogido tanta fama que hoy en día viene gente desde bastante lejos a visitarlo, e incluso reserva casas rurales y similares cerca para ir a visitarlo. Por ello, incluso si vas a visitarlo en fechas señaladas es importante reservar con antelación si no te quieres quedar sin verlo. Como vamos a explicar más tarde, el paraje es impresionante. Un camino natural que discurre paralelo a un rio que forma pozas y cascadas naturales de un agua cristalina, haciendo que por su color al sitio le lleguen a llamar el Caribe navarro, y eso que la temperatura de su agua y el tiempo que suele hacer no invita a bañarse.
Para reservar la visita basta con entrar en esta página e introducir nombre, apellidos y DNI de los que queramos acudir. Según leo si reservas y luego no acudes o no has cancelado la visita 24 horas antes, te quitan el derecho a entrar durante el siguiente año. Por ello si estas dudando en alguna fecha si ir o no, reserva, pero si luego vas a ir más tarde acuérdate de cancelarla si no puedes ir (supongo que será fácil de cancelar, pero dado que no tuve que no lo sé. Si alguien ha tenido que cancelar estaría bien que deje un comentario y nos lo cuente). Para los que vivimos cerca puede ser incluso buena idea reservar y si vemos que va a hacer ese día mal tiempo cancelamos la visita uno o dos días antes.
En cualquier caso el “aforo máximo” del Nacedero del Urederra es de 450 personas día. Hasta el 60% de plazas se pueden reservar, pero siempre queda un 40% de plazas sin reservar. Así que aun en días concurridos y sin reserva, madrugando bastante es posible entrar. Eso si, conviene madrugar bastante, ya que incluso la gente que tiene reserva suele madrugar bastante.
Para llegar al Nacedero del Urederra primero hay que llegar a un pequeño pueblo llamado Baquedano. El pequeño pueblo hoy en día está totalmente volcado con el monumento natural, y en el tendremos diferentes servicios como un parking (hay que pagar 3€ por todo el día, pero es la única opción si no queremos aparcar lejísimos), un par de restaurantes (que no estaba mal de precio el menú del día, no sé qué tal servirán luego la comida) o incluso una zona con mesas si queremos hacer un picnic para comer.
En el pueblo además, dentro del parking, hay 2 casetas. Una donde hay que validar la entrada para poder entrar en el enclave natural, y otra que es una centro de información turístico de la comarca. En nuestro caso ni paramos ahí porque íbamos directo al nacedero, a comer (aprovechamos para comer junto a la fuente del vino y al monasterio de Irache que está bastante cerca) y vuelta para casa. Pero delante nuestra había unos pidiendo información y la encargada de la caseta les estaba informando bastante bien, así que si pasáis noche cerca puede ser una buena opción para buscar otros planes. Sino, en la caseta donde te dan las entradas te dicen la ruta a seguir, que todo sea dicho, no tiene ninguna perdida.
La primera media hora de caminata discurre por el pueblo primero y una cuesta abajo después, con alguna zona llena de barro (por ello recomendable llevar un buen calzado). Es quizás lo más aburrido, pero a la media hora ya empieza el rio y nos encontramos la primera poza. A partir de ahí y la siguiente hora y media (tomándoselo con calma a echar fotos) es quizás lo más entretenido, poza tras poza de aguas cristalinas, todas ellas preciosas, que te hacen entender porque le llaman al sitio el Caribe navarro. He puesto unas pocos fotos de dichas pozas, pero de verdad que las fotos no le hacen justicia.
A partir de un pequeño puente de piedra, se sigue subiendo paralelo al rio y las pozas se acaban. Es quizás la parte más difícil de andar, y para el que vaya con niños pequeños quizás sea mejor terminar aquí ya que ya hemos pasado por la parte más bonita. Sin embargo al final del todo hay una cascada y un pequeño puente igualmente chulísimo así que, en la medida de lo posible recomiendo llegar hasta arriba.
Para acabar toca la vuelta. Se puede ir por un camino paralelo al otro, teóricamente más difícil. Nosotros, y según comprobé casi todo el mundo, volvimos por el mismo. Lo dejo a la elección de cada uno, pero desde luego el caminar al lado del rio del camino de ida me parece más atractivo. Al final del camino (o al principio si queremos parar antes de empezar a andar) hay una serie de merenderos así que si nos hemos llevado comida puede ser un punto ideal para comer.
En total, unas 3-4 horas de caminata por un paraje para mi sin igual (normalmente te dicen 2-3 horas pero siendo una caminata para disfrutar y a poco que pares a echar fotos calcúlale 4 horas) y para descubrir porque al Nacedero del Urederra le llaman el Caribe navarro, pese a que esté prohibido bañarse en sus aguas, este bastante lejos del mar, y sus aguas estén casi heladas..